Los últimos pasos de la robótica en España y en todo el mundo

La robótica ha recorrido un largo camino desde los primeros prototipos del siglo XVIII hasta la actualidad. La revolución digital del siglo XXI ha permitido incorporar todas las innovaciones de la informática a la ingeniería robótica tradicional. Pero también ha hecho posible lo contrario: generar entidades artificiales o bots dentro de un entorno virtual completamente digital, con el objetivo de facilitar la comunicación con el usuario o automatizar procedimientos a través del RPA. 

La robótica está creciendo a pasos agigantados gracias al desarrollo de la inteligencia artificial y el machine learning, y augura beneficios innumerables a nivel social y empresarial. En este artículo repasamos las disciplinas que podrán beneficiarse de los avances tecnológicos en la robótica, y señalamos los últimos avances logrados en España y a nivel internacional. 

Los avances de la robótica

En la última década, la robótica industrial ha triplicado el número de instalaciones en todo el mundo. Aunque todavía se asocia a los robots con tareas mecánicas y repetitivas, las nuevas estrategias digitales han ampliado sus posibilidades de aplicación para incluir áreas de actividad que estaban fuera de su alcance hasta ahora. 

Los siguientes son solo algunos de los avances de robótica más destacados:

• Aprendizaje de nuevas tareas: La inteligencia artificial y el aprendizaje automático han hecho posible que los robots asuman tareas cada vez más difíciles. Esta innovación no solo incluye la detección y recolección de piezas, sino la mejora de protocolos de comunicación entre robots que automatizan el proceso de fabricación sin necesidad de supervisión humana. 

• Fabricación inteligente: Algunas de las mejoras más significativas en la robotización industrial han tenido lugar en la industria automovilística. Además del uso tradicional de robots para el ensamblaje de piezas, en los últimos años se han empezado a probar robots móviles autónomos. Estos nuevos modelos pueden desplazarse por la fábrica sin conductor y realizar las labores que están programados para hacer en diferentes puntos de la línea de producción. En un avance incluso más notable, los worker robots de Google pueden interactuar con humanos e incluso descargar una personalidad propia para facilitar la comunicación.

• Medicina y cirugía robótica: Robots como Da Vinci ya son capaces de realizar operaciones quirúrgicas y contribuir al tratamiento de determinados tipos de cáncer. El uso de robots en un entorno médico puede contribuir a aumentar la precisión quirúrgica y reducir el tiempo de recuperación postoperatoria. También se han creado robots que detectan y eliminan restos de virus como el ébola.

• Robots multitarea: La empresa Momentum Machines ha creado un robot capaz de realizar todas las tareas necesarias para preparar una hamburguesa de forma simultánea. Esta innovación de Momentum Machines permitirá una automatización de procesos en los restaurantes de comida rápida.

• Robots domésticos: La fabricación de robots a precio bajo para un entorno doméstico ya está en marcha. Robots como el Asus Zenbo o Pepper se desplazan de forma autónoma y pueden, entre otras cosas, detectar emociones humanas o incluso conectarse a los demás componentes de un hogar inteligente.

Bots y robots: procesos mejorados gracias al RPA

Además de las innovaciones en la robótica industrial, la robotización también contribuye a automatizar procesos en un entorno completamente digital. Es el caso de la automatización robótica de procesos (RPA, por sus siglas en inglés). Normalmente asociamos los robots con la optimización en la fabricación de componentes, y la RPA consiste en aplicar ese mismo concepto a modelos informáticos. 

En ese sentido, la RPA consiste en el uso de soft bots, es decir, robots de software. Estos robots se comunican con una aplicación informática concreta y permiten aumentar la productividad, desempeñando tareas que anteriormente se realizaban de manera manual. También son capaces de comunicarse con el usuario, corregir faltas de ortografía o llevar un registro de la productividad, entre otras muchas funciones. 

El avance de la RPA se debe, sobre todo, al aumento en la capacidad de procesamiento de los ordenadores actuales, junto a la mejora de las conexiones de Internet. La RPA hace posible que la información se procese a mayor velocidad, entre otras muchas funciones como actualizar una base de datos, enviar correos electrónicos de forma automática o integrar distintos sistemas informáticos, programas y aplicaciones.

Ventajas de los robots hoy en día

Los apartados anteriores son suficientes para constatar que la implantación de la robótica tiene considerables beneficios tanto para la sociedad como para las empresas. Algunas de las principales ventajas de la robótica y su desarrollo tecnológico son:

• Mayor productividad y menor coste: Los robots agilizan y optimizan cualquier clase de proceso automatizable. Al ser capaces de trabajar veinticuatro horas al día, mejoran el cumplimiento de tareas y reducen los costes. 

• Mayor información de gestión: Los robots pueden llevar un registro automático de las tareas desempeñadas en el ámbito industrial o administrativo. Eso permite una revisión más concienzuda de los objetivos logrados, para modificar el flujo de trabajo y mejorar la productividad de la empresa. 

• Eficiencia energética: El uso de robots contribuye a una mayor precisión, con menos malgasto de recursos. Además, su eficiencia energética reduce la huella de carbono del sector en el que se emplean, y pueden incluso ayudar a producir fuentes de energía renovable como las placas fotovoltaicas. 

• Nuevos mercados: La mejora de la conectividad inteligente ha hecho que la robótica se integre en otros sectores económicos como la industria textil o la alimentaria. La mayor flexibilidad de desplazamiento de los robots ha dejado obsoleta la línea de producción habitual, lo cual tiene aplicaciones para cualquier tipo de actividad industrial que quiera automatizar procesos. 

Ingeniería robótica en España

Según el informe de 2020 de la Federación Internacional de Robótica, España es el cuarto país europeo con más instalaciones de robótica industrial, y el undécimo país en el ránking industrial en cuanto a la automatización de tareas en fábricas. Atendiendo a esas cifras, el sector industrial español puede considerarse un referente en la aplicación de la ingeniería robótica.

A pesar de ello, la implantación de robots en la actividad económica española todavía tiene margen para desarrollarse. Alrededor de un 50% de robots en España forman parte de la industria automovilística, lo cual arroja cierta luz sobre las limitaciones en el uso de robots dentro del sector empresarial. 

Aunque la mayoría de multinacionales españolas utilizan procesos de automatización robótica, es posible explicar cierta lentitud en el desarrollo de nuevas funciones por la falta de técnicos expertos en robótica. Afortunadamente, este sector en auge ya muestra signos de crecimiento, con ejemplos como el uso del robot de cirugía Da Vinci en IMED Valencia o las innovaciones en robótica móvil por parte de empresas de robótica en España como Robotnik. 

El futuro de la robótica

Está claro que todavía hay mucho margen de crecimiento para la tecnología robótica. En un futuro próximo, podemos esperar que el 5G aumente la capacidad de trabajo del robot y la comunicación con humanos. Es probable que la optimización robótica llegue a los servicios profesionales, y los robots logísticos ocupen puestos con salarios habitualmente bajos. 

También cabe destacar el advenimiento de la robótica blanda, mediante la cual la robótica se integra con tejidos orgánicos. Esta disciplina permitirá, por ejemplo, crear vendas inteligentes que faciliten la curación o contribuir a una mayor movilidad en personas que han sufrido una pérdida muscular. Los robots blandos tendrán, por supuesto, una función importante en la robótica médica: ya se baraja la posibilidad de generar órganos robóticos integrados con el organismo, para reemplazar órganos extraídos quirúrgicamente a causa de enfermedades como el cáncer.

Por supuesto, las innovaciones de robótica en la industria del transporte seguirán avanzando. Uber ya ha probado vehículos semiautónomos, que funcionen con autonavegación, pero devuelvan el control al conductor ante circunstancias arriesgadas. Y no solo eso: los robots también podrán contribuir al cuidado del medioambiente a través del uso de materiales biodegradables, que permitirán desecharlos sin preocuparnos de su efecto en el entorno.

Como demuestran los anteriores ejemplos, la robótica permite un sinfín de usos y aplicaciones en toda clase de actividades tanto económicas como sociales. La llegada del 5G y el aumento de la inteligencia artificial darán un empuje definitivo a todos los proyectos de robótica que ya se encuentran en fase de desarrollo e investigación. Cabe esperar que, dentro de los próximos diez o quince años, la interacción robot-humana se convierta en una parte fundamental de casi todos los aspectos de nuestra vida.